Crítica | Flow

Cine Canibal | 2024

Por mucho tiempo el cine de animación ha cargado con el estigma de crear películas dirigidas casi exclusivamente al público infantil. Poco a poco esto ha cambiado, entendiendo que se trata de una herramienta más para contar historias, incluso de maneras más creativas de lo que la acción real podría permitirse. Este es el caso de Flow, el segundo largometraje del cineasta originario de Letonia, Gints Zilbalodis.

El protagonista es un gatito negro que pasa sus días en completa soledad. Si bien su mundo muestra rastros de la presencia de seres humanos, no sabemos que ha pasado con ellos (y la película no necesita explicarlo).

Un día, mientras el gatito sale a cazar, es arrastrado por una gran inundación. Es así que inicia su viaje por un mundo lleno de agua, en el que deberá aprender a adaptarse y a convivir con otras especies de animales.

Lo primero que llama la atención de Flow es el hecho de ser una producción sin diálogos. Si bien en 2024 tuvimos una película que optó por esta misma vía con Mi amigo robot, la principal diferencia es que Zilbalodis evita humanizar a sus personajes (que además del gato, incluye a un labrador retriever, un lémur, un capibara y un ave secretaria), dejando que sean las personalidades de sus respectivas especies las que determinen su forma de actuar y comuniquen, a través de sus sonidos naturales, lo que sienten y lo que piensan.

Pero lejos de quedarse en una simpática historia protagonizada por animalitos, lo que Flow ofrece es un relato muy personal sobre temas universales como el miedo, la soledad, la colaboración y, muy especialmente, la resiliencia.

El propio Zilbalodis ha mencionado en varias oportunidades que la travesía del gato es un reflejo de su propio camino como director; acostumbrado a trabajar en solitario, en esta ocasión tuvo que aprender a confiar en un equipo para sacar adelante este proyecto. Por ello, no resulta extraño que como espectadores podamos identificarnos tanto en los personajes, como con los temas sobre los que reflexiona de manera tan hábil la película.

Las imágenes en Flow son un punto y aparte, logrando momentos tan bellos como sobrecogedores en los que, junto a la música, nos invitan a un viaje emocional e, incluso, espiritual. Se trata pues de una invitación a fluir ante las adversidades y los cambios a los que nos enfrenta la vida.

Flow es una muestra de lo que sucede cuando se prioriza el talento y la creatividad, no sólo en la animación, sino en el cine en general. Absoluta belleza.

Cine Caníbal | 2024

Por cierto:

En 2012, Gints Zilbalodis realizó el cortometraje Aqua, el cual terminaría siendo el primer paso hacía Flow. Puedes verlo en el canal de YouTube del director:

Aqua | Gints Zilbalodis

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Ficha Técnica 

Titulo original: Straume/ País: Letonia/ Año: 2024/ Director: Gints ZIlbalodis/ Guion: Matiss Kaza y Gints ZIlbalodis/ Música: Gints ZIlbalodis y Rihards Zalupe/ Fotografía: Gints ZIlbalodis/ Duración: 85 minutos